Una niña es invitada por su madre a subir al cerro más alto de la región junto a su pueblo. Hace tiempo que no llueve. Suben a pedir por agua, a rogarle a Dios para que llueva. Lo hacen así porque ese bendito elemento es  esencial para el provenir de las comunidades. Ahí el empeño por ‘hacer llamados de lluvia’.

Ella sube, como todos. No entiende mucho que sucede, pero le gusta mucho el arroz con leche. Y por eso sube, a esperar el momento de compartirlo. Sabe que con ese delicioso alimento, allí en las alturas, culminará una verdadera misa ancestral donde los llamadores de lluvia, que son todos, rogarán al Dios de todas las aguas.

Todo acontece alrededor suyo: lágrimas, llantos, gritos y danzas. De manera impensada, ‘se ofrece’ a Dios, el poco de agua que les queda. La rogativa se contruye entre todos, la comunidad entera es protagonista de ese maravilloso acto de fe. 

Dios es nuestro guardián, ¿entiendes?  le dice su madre. Y luego agrega: - Ponte de rodillas. La niña obedece. Así, repitiendo lo que hace su gente, cae la tarde. Ya es hora de regresar. 

Ya grande, Marilyn recuerda ese dia y afirma sin dudarlo: - Fue la primera vez en mi vida que sentí la presencia de Dios. 

Lo dice en una Minga de Bendita Mezcla, allá por el 2018.

Diego Irarrázabal, teólogo chileno que vivió en los Andes durante largas décadas escucha este relato 3 años más tarde, en otra instancia de Bendita Mezcla y emocionado nos recuerda que la espiritualidad andina es comunitaria por excelencia, igual que cristianismo. La historia de esta niña le trae fuertes recuerdos de todo lo aprehendido en el pasado con estos pueblos del altiplano. – Ellos me enseñaron -y yo les agradezco- a acompañarles y a rezar con ellos y a clamar en esas situaciones, confiesa.

Un ejemplo paradigmático que revela todo el movimiento relacional de los hijos e hijas del  altiplano para con su madre tierra, Diego la observa en el caso del Cerro Rico de Potosí, asociado luego en el catolicismo  con María la Madre de Dios y símbolo de fertilidad.  - El mundo andino tiene  una actitud reverente, cariñosa pero también suplicante para con la Madre Tierra para que de buenos frutos y los alimente. Más que una costumbre primitiva es un modo de vivir para luego gozar la fe. Porque en la medida que recibimos bendiciones de Dios las podemos compartir y celebrar. 

De igual forma que con Diego, Emilce Cuda, teóloga argentina recientemente nombrada por Francisco para como "jefa de oficina" de la Comisión Pontificia para América Latina del Vaticano, escucha a Marilyn. Desde la escucha nos recuerda que la fe de esta niña es recibida de un pueblo. - Lo que le pasó a ella es lo que nos pasó a todos nosotros, nuestra experiencia de Dios a sido a traves de una comunidad. Y es que Dios se revela en la historia a través de su pueblo. Luego y de manera muy contundente, Emilce nos recuerda que para todos quienes afirmamos nuestra fe en un Dios creador, a su vez estamos afirmando, confesando, y profesando que ese mundo es de Dios. Y y que por lo tanto, nadie puede apropiarse de él.  La idea de un Dios creador y providente, proveedor del agua en el relato de la niña pero de la vida en general, está afirmando algo que la madre de Marilyn le recuerda en plena rogativa : que Dios nos da el día,
la luz, los alientos…la vida…que él es todo para nosotros.

Con Dios todo. También el agua. 

Sin él, nada. 

2. La subida al cerro y ‘la rogativa’ de Bendita Mezcla 

Estamos iniciando la subida, apenas vamos por las faldas del cerro. Como jóvenes que somos nos sentimos en parte como esa niña Marilyn, deseosos de sentir la presencia de Dios, y de aprender junto a nuestro pueblo el arte de amarlo y de sabernos amados por él. No en abstracto, sino siempre en ´relación’. A Dios por el prójimo, como Jesús.

Así, cantando, danzando, clamando… ¡mingueando! queremos construir juntos una rogativa que traiga agua a nuestras comunidades, que refresque la vida y la fe. Juntxs, en ronda comunitaria conjurando toda sequía.

Estamos ansiosos de poder enfocarnos de una vez en cada proyecto y madurarlo juntos con alegría, con esperanza y con el compromiso que tienen las urgencias de cada momento de la historia. Mapear narrativamente las prácticas de NuestrAmérica, es nuestro desafío.. 

Con Marilyn, con Diego, con Emilce y con todxs nuestrxs maestrxs sabedores de esas otras prácticas damos gracias por este regalo de descubrirnos minguerxs, de estar juntxs, con las manos en el barro para atender una necesidad comunitaria, y luego sentarnos cuerpo con cuerpo a compartir la rica comida que se guisó con amor. 

¿Quiénes construirán los caminos de búsqueda del año dos de bendita mezcla? Los que caminan hacia el arcoíris… 

3. Arco Iris al anochecer

“Arco iris al anochecer, buen tiempo al amanecer.” 

Refrán campesino

Con más de 40 jóvenes participantes de casi todos los países de nuestro querido continente,  en el atardecer del 5 de agosto pasado terminamos la primera etapa formativa de esta Escuelita de Comunidades que llamamos Bendita Mezcla. 

La experiencia de poner todos los saberes en común, sentipensando en comunidades de aprendizaje los 10 itinerarios socio teológicos propuestos ha sido para nosotrxs un verdadero arcoíris de bendiciones, digno de ser disfrutado. La fe de nuestrxs maestrxs populares, en diálogo con la bella tradición teológica latinoamericana, fue un baño de luz para desarmar en colores los cristales del agua de nuestra vida. Durante los más de 5 meses de trabajo compartido, hemos podido vivenciar un precioso fenómeno multicolor de crecimiento y maduración según edades, creencias o regiones.  

En el arte de hacer el fuego, en el reflejo luminoso de nuestro propio arcoíris, seguimos dando como jóvenes latinoamericanos, razones para la esperanza.

4. El amanecer de Bendita Mezcla. Parte II

Con mucha ilusión, este 2 de septiembre abrimos una segunda etapa de Bendita Mezcla que congrega a una parte importante de lxs jóvenes que concluyeron la formación en 2020 y a lxs que se egresaron recientemente, durante la primera mitad del 2021.  Una mezcla que se nutre de juventudes de 16 países. 

En este caso, nos desafiamos a trabajar durante tres meses a través de una metodología de construcción colectiva que incluye ‘5 mingas de teología narrativa’ que se complementan cada una con sus respectivos ‘trueques narrativos’. A lo largo de los meses de septiembre, octubre y noviembre deseamos poner en tensión nuestras prácticas y ministerios pastorales para madurar finalmente un proyecto de investigación-acción-participativa, desde el cultivo colectivo de saberes.  

Una maratón de mingas los jueves, cada quince días, nos permitirán caminar colectivamente las cinco vías: Narrativas frente a las violencias, Mujeres y organización comunitaria, 3T y poetas populares, Santidad política e Interculturalidad e imaginarios festivos. 

Que sea un buen amanecer. Y que sea para la Vida.

Equipo de caminantes de Bendita Mezcla

-Por los cinco caminos del año dos-

Pd. La ilustración que acompaña esta inauguración del año dos fue realizada por Kendal Navarro Portillo, artista salvadoreño, al resonar la historia del Marilyn Reina de Bolivia, que fue traficada por un sistematizador argentino. En esa imagen, escondida nuestra mezcla, nuestro método.

Pd2. Adjuntamos un texto que nuestro hermano y compañero Diego Irarrazábal escribió al escuchar la historia de Marilyn.