19 de Setiembre de 2013
(Jesús Bastante) En los seis meses que lleva en el pontificado, el papa Francisco ha hecho gestos elocuentes de ruptura en el ámbito simbólico y doctrinal. No solo ha dado ejemplo personal de austeridad y humildad, sino que ha priorizado en sus viajes y visitas la atención a los más desfavorecidos. A estas alturas, está claro el compromiso del nuevo Papa con los pobres y la justicia social. Pero en las últimas semanas el Papa ha dado también pasos significativos en la agenda de transformación de la Iglesia. Con su apelación a los mandatarios del G20, reiterada ante el cuerpo diplomático, para que eviten una intervención militar en Siria ha dejado claro que piensa ejercer un protagonismo directo a favor de la paz.
(Jesús Bastante) En los seis meses que lleva en el pontificado, el papa Francisco ha hecho gestos elocuentes de ruptura en el ámbito simbólico y doctrinal. No solo ha dado ejemplo personal de austeridad y humildad, sino que ha priorizado en sus viajes y visitas la atención a los más desfavorecidos. A estas alturas, está claro el compromiso del nuevo Papa con los pobres y la justicia social. Pero en las últimas semanas el Papa ha dado también pasos significativos en la agenda de transformación de la Iglesia. Con su apelación a los mandatarios del G20, reiterada ante el cuerpo diplomático, para que eviten una intervención militar en Siria ha dejado claro que piensa ejercer un protagonismo directo a favor de la paz.
©2017 Amerindia - Todos los derechos reservados.