¿Qué Iglesia para qué papa?

21 de Marzo de 2013

(Eduardo de la Serna) Así como en su momento declaré que no estaba sorprendido por la elección de Jorge Bergoglio al ministerio de Pedro, sí debo reconocer mi sorpresa -y desagrado, en muchos casos- por las reacciones suscitadas, muchas que van desde una especie de odio visceral hasta las que manifiestan una infantil necesidad de papá inmaculado. Algunos buscan la más pequeña mancha en el pasado, revisado con lupa; otros niegan toda sombra, aun tenebrosa del pasado, escudándose en que “recién empieza” como si Francisco Iº hubiera salido de la nada; casi parecieran que entrarían en pánico ante la menor duda, o que se les derrumbaría hasta el fondo la esperanza. 




(Eduardo de la Serna) Así como en su momento declaré que no estaba sorprendido por la elección de Jorge Bergoglio al ministerio de Pedro, sí debo reconocer mi sorpresa -y desagrado, en muchos casos- por las reacciones suscitadas, muchas que van desde una especie de odio visceral hasta las que manifiestan una infantil necesidad de papá inmaculado. Algunos buscan la más pequeña mancha en el pasado, revisado con lupa; otros niegan toda sombra, aun tenebrosa del pasado, escudándose en que “recién empieza” como si Francisco Iº hubiera salido de la nada; casi parecieran que entrarían en pánico ante la menor duda, o que se les derrumbaría hasta el fondo la esperanza. 

Procesar Pago
Compartir

debugger
0
0

CONTACTO

©2017 Amerindia - Todos los derechos reservados.