27 de Marzo de 2022
[Por: Óscar Elizalde Prada | ADN Celam]
«Al atardecer» del viernes 27 de marzo de 2020, hace exactamente dos años, el Papa Francisco presidió uno de los momento extraordinario de oración más memorables de la historia contemporánea, cuando la humanidad completaba las primeras semanas de confinamiento por la pandemia del Covid-19 –que aún sigue generando dolor y sufrimiento–. Ese día, a esa hora, dos billones y medio de personas acompañaron al Sumo Pontífice a través de los medios de comunicación, desde todos los rincones del mundo, en un acto de fe y comunión que en adelante sería recordado como Statio Orbis. “Él estaba solo, pero nunca más visto que esa noche… gran parte de la humanidad estaba siguiendo lo que estaba pasando”, afirma su biógrafo, el periodista Austen Ivereigh.
Aquel 27 de marzo de 2020
“Lo que ha pasado el 27 de marzo del 2020 es algo que quedará impreso en nuestra memoria”, comenta Andrea Tornielli, Director Editorial del Dicasterio para la Comunicación. “Nunca había pasado que una oración así, pudiera reunir a muchísima gente, millones y millones de personas de todo el mundo que estaban afectadas por la pandemia, tenían miedo, estaban encerradas en sus casas”.
Mons. Lucio Adrián Ruiz, Secretario del Dicasterio para la Comunicación, no olvida que “en el momento más crítico de la historia contemporánea, cuando todos estábamos encerrados en nuestras casas, cuando estábamos aterrorizábamos porque no sabíamos lo que pasaba, el Papa salió solo, a caminar por una plaza de San Pedro oscura, bajo la lluvia, para rezar”. Esta imagen quedó impregnada en su memoria –como en la de toda la humanidad–, y dio origen al libro «¿Por qué tenéis miedo? ¿Aún no tenéis fe?» (2020), bajo su coordinación, que ya cuenta con varias ediciones en diferentes idiomas.
En la noche oscura de la pandemia
“Fue un acto de gran comunión que merece ser recordado, porque es un ejemplo de la cercanía que el Papa Francisco demostró a los que sufren, a todos nosotros, en un momento de gran dificultad que desafortunadamente aún no ha pasado”, asegura Tornielli. Ivereigh, por su parte, considera que “lo que hace el Papa es guiarnos, mostrarnos que a través de esa noche oscura de la pandemia por la que estamos pasando, hay un nuevo horizonte (…), algo se está desvelando, y es nuestra unidad como humanidad, nuestra dependencia los unos de los otros”.
Para Mons. Ruiz, “entender esta dinámica de llevar al Pueblo de Dios al templo y desde el templo bendecir al Pueblo de Dios, es la dinámica entera de la Iglesia de ser puente entre Dios y el hombre, y acompañar y bendecir la historia”. Se trata, sin duda, de una imagen de lo que ha sido la pandemia “pero más bien es un ícono de cualquier sufrimiento del hombre donde Dios siempre se hace presente”, asevera el religioso argentino.
“Esas imágenes nos tienen que evocar una presencia de Dios en la historia y una compañía de la Iglesia en la historia del hombre… por eso, la idea es que esas imágenes nos hagan recordar siempre que cuando en nuestra vida, en nuestra historia, el mar se mueve (…), estamos juntos en la barca y Dios nos pregunta: «¿por qué tienen miedo, no tienen aún fe?».
Para conmemorar el segundo aniversario de Statio Orbis el Celam ha publicado un breve video que recoge las reflexiones de Mons. Lucio Ruiz, de Andrea Tornielli y de Austen Ivereigh.
©2017 Amerindia - Todos los derechos reservados.
