[Comité de Cultura Terranova | Asociación Cultural Caminar]

Hace algunos años, un grupo de amigos, casi todos  adultos mayores con una larga experiencia en el trabajo social  y la promoción del ser humano   a condiciones  de mayor  dignidad, nos reunimos para compartir ideas, sueños y recuerdos de nuestras época juvenil.

Llegamos de distintas  comunas del gran Santiago y tras compartir varios almuerzos y otras tantas tardes, añorando y rememorando lo vivido, nos dimos cuenta de que cada uno de nosotros, de alguna manera, nos encontrábamos participando en distintas instancias que no siempre nos proporcionaban una satisfacción personal. Descubrimos que  aún teníamos mucho que aportar, desde la experiencia y la creatividad, a las nuevas generaciones. Así nació, en noviembre del 2018 la Asociación Cultural Caminar, organización sin fines de lucro, cuya finalidad última, es ofrecer oportunidades de desarrollo social, cultural y educativo a niños, jóvenes, adultos y adultos mayores, a través de acciones y actividades que contribuyan a ese objetivo.

En 2019, postulamos un Proyecto para adquirir implementos para organizar Talleres Culturales que trabajaríamos en conjunto con algunas Juntas de Vecinos del Sector 6 de Puente Alto. Pero vino la Pandemia y los instrumentos musicales, los instrumentos para la batucada y otros elementos, quedaron durmiendo en un rincón de la casa de algún socio, a la espera de salir a la luz al momento que pase esta emergencia.

En medio de la Cuarentena total del 2020, la profesora pensionada Cecilia Durán, escribió y compartió a sus colegas del grupo Soñadores de la Educación, un texto literario que daba cuenta de los sentimientos que este confinamiento obligado, le provocaba.

Ese texto, fue como un llamado a invitar a otros adultos mayores a escribir acerca de sus experiencias. En alianza con el Comité de Cultura del Conjunto Terranova, nos lanzamos a la aventura, al desafío  de construir entre todos un espacio, en donde verter tantas historias, tantos recuerdos, tantos sueños y esperanzas atesorados en el trascurso de sus vidas. Convocamos a muchas personas, amigos, familiares, vecinos. Le propusimos que invitaran a sus padres, a los jóvenes que invitaran a sus abuelos a escribir libremente, en verso o en prosa, porque en los viejos está la historia, la sabiduría de generaciones que transitaron los mismos espacios, que hicieron recorridos similares a los que hoy enfrenta nuestra sociedad y que pueden aportar a hacerla un poco mejor.

Dijimos a los adultos mayores “Cuenta tu vida, porque tu vida cuenta”. El resultado lo tienen ante ustedes, en el texto que ponemos en sus manos (Tomado de la Introducción).

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