Liturgia: ficción o realidad

01 de Abril de 2021

[Por: Juan José Gravet]




Homilía del Jueves Santo

 

1. 3D y 4D

 

En este Jueves Santo, yo quería compartir con ustedes una reflexión que me parece que toca el corazón mismo de lo que estamos celebrando y por eso partir de un tema que es cotidiano en nosotros y que de alguna manera nos toca; no sé si a Uds. les gusta ir al cine, ver películas, ¿les gusta eso?

 

Uds. han visto, acá tenemos un cine muy grande cerca...; ¡qué reales son las películas, como se hacen ahora! Incluso ha avanzado la tecnología, a punto de hacer películas en tres dimensiones y ahora vienen en cuatro dimensiones, se mueve la sala, lo efectos no son sólo visuales, sino que experimentamos lo que está pasando allí. Casi reales. Casi. Pero no son reales. Porque estamos hablando de ficciones. Por más que se trate de una película histórica, que se base en hechos reales, siempre va a ser una representación de algo que pasó.

 

2. ¿Teatralización?

 

Y decía el guión de la misa, recién, fíjense las palabras, nosotros estamos celebrando la memoria de lo que pasó allá hace dos mil años en Jerusalén, la última cena de Jesús. Estamos haciendo memoria.

 

La pregunta que estoy haciendo con esto, es así: ¿esto que estamos haciendo es como una especie de teatralización de la última cena? Es decir, vamos a hacer en un momento el lavatorio de los pies, también en un momento más vamos a hacer la mesa, el pan, el vino, vamos a decir las mismas palabras de Jesús, estamos repitiendo lo mismo, pero esto pasó allá, hace dos mil años. Entonces es como que estaríamos haciendo una representación.

 

3. Liturgia

 

Y allí es donde viene el tema de hoy. ¡No es así! ¿Y por qué no es así? Porque aquí mismo está aquel que hizo lo de la última cena y lo está repitiendo. Es decir, la Eucaristía (y en definitiva toda liturgia), es el ejercicio del ministerio de Jesús. Jesús mismo está haciendo lo que nosotros estamos viendo que está desarrollando el sacerdote. Es Jesús. Y esto, entonces cambia toda la realidad de lo que nosotros celebramos. Ya no es simplemente un ritual, una representación, un hacer memoria, un conmemorar, sino que es mucho más. Es hacer.

 

4. Signo eficaz

 

Por eso el sacramento es un signo eficaz, porque el signo produce lo que estamos diciendo. Es decir, cuando yo les digo en la consagración: “Esto es mi cuerpo”, no es que simplemente estoy repitiendo palabras, se está haciendo lo mismo que Jesús hizo en la última cena, porque Jesús está con nosotros aquí. Él está haciendo eso. Él toma mis palabras y mis manos y mis gestos, para hacer lo mismo. O sea que estamos compartiendo la misma mesa que los Apóstoles, estamos en la última cena, no sólo porque es el Jueves Santo. Cada misa. Y por eso le venimos a traer al Señor, porque sabemos que es fuente de toda gracia, todos nuestros problemas, venimos a pedirle, que nos sane, que nos de trabajo, que nos consiga lo que estamos necesitando.

 

5. No es ficción

 

No estamos simplemente haciendo un ritual, eso quiero decir. ¡Es mucho más! Aunque aquel que venga de afuera y mire lo que estamos haciendo y diga: estos están haciendo una representación. Es mucho más que eso. La Liturgia no es ficción. Es realidad. Por eso nosotros lo llamamos Sacramento. Y ahí está el misterio que celebramos. Quiero decir: nosotros tenemos que ser conscientes de esto, porque el lavatorio de los pies, no es sólo un gesto.

 

Jesús mismo está realizando esto conmigo, con cada uno de nosotros. Esto es tan importante, porque el Señor nos toca, nos acaricia, nos bendice, nos va a alimentar con el pan y el vino, el Señor está siempre atento a nuestras necesidades.

 

6. Su Presencia

 

Nosotros venimos a Él y nos unimos a este misterio y celebramos que Él está con nosotros. Celebramos su presencia. Por eso el Jueves Santo es un día muy clave, porque Jesús instituyó allí, esto que nosotros llamamos la Misa y nos dijo: “Hagan esto en memoria Mía”. Pero no “en memoria”, en el sentido de recordar, de no se olviden, como si fuera un tema de memoria, sino porque cada vez que lo realizamos Él está en medio nuestro haciéndolo. Y este es el misterio de nuestra fe. Esto es lo que celebramos cada Jueves Santo y cada misa.

 

7. Conclusión

 

Por eso, quería pedir, en esta celebración de hoy, que cada uno de nosotros descubra este misterio, en el sentido de acercarnos cada vez más, justamente porque el Señor viene a derramar todas las gracias sobre nosotros, viene a hacer de nosotros hombres nuevos, viene a que cambiemos de rumbo. Justamente porque estamos metidos en el Misterio de la Salvación.

Procesar Pago
Compartir

debugger
0
0

CONTACTO

©2017 Amerindia - Todos los derechos reservados.